Médicos, psicólogos y padres dan el OK a la propuesta de la ministra Ana Mato de elevar de 13 a 16 años la edad mínima para el sexo consentido con adultos. Desde que la titular de Sanidad lanzara la propuesta en el Congreso de los Diputados el miércoles, se ha abierto un debate social en pro de una lucha más eficaz contra los abusos que se cometen a menores. En la calle, las familias piensan que es una medida correcta, “pues, a los 13, los niños no son, en la mayoría de casos, conscientes de lo que hacen”.